Punto de partida: Refugio de la Trapa, 1690 Mts.
Tiempo de subida: 3,5 horas.
Tiempo de bajada: 2,5 horas.
Desnivel acumulado: 1196 Mts.
ACCESOS
Pista forestal desde Villanua (Huesca), solicitando al ayuntamiento de la localidad permiso para acceder con coche con unos días de antelación, llegaremos con el coche hasta practicamente el refugio de la Trapa.
Esquema de la ascensión:
Refugio de la Trapa:
El refugio es el punto de partida para esta ascensión, dadas las condiciones en las que se halla en esta ocasión, llego a suponer que esta vía de ascenso al Collarada es frecuentada por muchos montañistas y también por numerosos individuos ajenos a la montaña, dado que, la acumulación de basuras en el interior es de tal magnitud que nos obliga a pasar la noche fuera de sus dependencias. Una caterva de gentes sin valores ni respeto ha pasado por aquí, no hablemos más de ello.
Nos encontramos en un rellano situado bajo las paredes de la Trapa (barrera de precipicios que defienden al Collarada por el S.), desde este enclave, buscaremos el tramo más apropiado para superar esta barrera con una fácil y corta trepada.
Una vez superada la Trapa, el Collarada queda bien a la vista, realizamos el ascenso "a discrección", buscando los tramos más evidentes.
Seguimos progresando hasta alcanzar una cubeta glaciar, a unos 2500 mts. de altitud:
Rodeamos la cubeta por la izquierda, continuamos el ascenso hacia la canal de la cima para llegar a la parte más empinada y dificultosa de la subida, una inmensa pedrera con una gran roca lisa que marca el itinerario.
Alcanzamos el corredor final que superaremos sin mayor dificultad, dejamos los pasajes rocosos y nos adentramos en la parte final por donde discurre una senda colgada que nos deja en la cima.
Panoramas desde la cima:
Hacia el Circo de Ip:
El Ibón de Ip desde la cima, la temible cara N. del Collarada, al ibón, casi 1000 mts. en vertical...
El Collarada es un macizo muy célebre del Pirineo Aragonés, siendo esta ascensión por la vertiente S. apta para cualquier montañista mínimamente experimentado, la dificultad de reduce a dos pasos de trepada por barrera de rocas, el desnivel a superar y a las muy empinadas rampas finales antes de la cima. Panoramas inmensos desde las montañas Navarras hasta las altivas cumbres de Ordesa y Vignemale. Curiosamente, el Collarada forma un eje en perfecta linea recta con el Anayet y el Midí.
Henry Russel fue uno de los más grandes Pirineistas del siglo XIX. Dedicó gran parte de su vida al conocimiento de las altas montañas que se extienden a ambos lados de la cordillera. Vivió la montaña con pasión y escribió sobre su pionera experiencia de cumbres casi vírgenes.